Jaime nos envía la crónica del partido.
Partido a priori muy difícil de ganar ya que el equipo local contaba con una muy buena
plantilla, la cual este año junto con la de Corazonistas se pelearan por llevarse el título
de liga.
A pesar de haber tenido que madrugar un poco, hemos salido al campo bien
enchufados y hemos conseguido hacer una fantástica primera parte.
En ataque posicional, hemos conseguido superar bien la 5:1 aprovechando los huecos
que se generaban por el centro dado que el pivote se estaba moviendo con astucia
entre la defensa. Por el contrario, hemos tenido unas 7 o 8 pérdidas de balón que han
provocado que nos fuésemos al descanso con 5 goles en contra. Balones que si no
hubiéramos perdido, podríamos incluso haber ido por delante del marcador al
descanso.
En defensa, seguíamos estando muy blandos a la hora de contactar. Nos quedábamos
en la línea a esperar que el contrario nos rebasara, siendo que si nos rebasaba ya
estábamos provocando penalti por defensa interior. Sus ataques duraban muy poco ya
que al no estar tan duros como deberíamos, encontraban muy pronto los espacios. Sin
duda, lo mejor de la primera parte fue la actuación bajo los palos. Tanto Mario Sancho
como Pablo Iñigo estuvieron sensacionales y pararon casi todo.
En la segunda parte parece que se nos olvidó como debíamos de jugar. Cometimos
muchos errores de principiante (pasos, dobles…) que nos pasaron factura y que provocaron que el equipo contrario se hiciera dueño del partido, llevándolo al ritmo
rápido de contraataques al que están acostumbrados a jugar. Ellos corrigieron muy
bien los fallos en defensa y a partir de ahí nos costaba mucho entrar. A duras penas
conseguíamos lanzamientos y en seguida ellos se hacían con la posesión. Y al igual que
la primera parte seguíamos demasiado blandos en defensa (hay que dejarse el miedo
en casa).
Fue un partido emocionante y que pese a la diferencia de nivel de ambos equipos se
mantuvo intenso y se trató de aguantar. Cabe destacar la actuación de Andrés
Higueras que se echó el equipo a las espaldas durante casi todo el partido y fue quien
recortó las diferencias.
El resultado final fue de 33 – 18.
De partidos como este podemos sacar una conclusión: Que aunque los resultados no
nos acompañen, las cosas empiezan a salir. Hay que tener la cabeza un poco mas
metida dentro del partido para no cometer ningún error y sobre todo bajar a entrenar
concentrados, para seguir trabajando todo lo que aún nos queda por aprender.
“El mejor ataque es una buena defensa”
Gracias por la crónica Jaime.
